Luego de unas semanas de pocas novedades, 2024 empieza a hacer ruido, y si estabas añorando las infaltables aventuras de acción en 2D, Last Chicken Game vuelve a la carga con una versión mejorada de Willy Jetman: Astromonkey’s Revenge.
Me imagino lo satisfactorio que debe ser para un estudio indie lograr que su primer proyecto pise el escenario lo suficientemente fuerte como para entusiasmar al público. Y más teniendo en cuenta la infinidad de títulos que podemos encontrar en el género de acción en 2D. Así fue el caso del estudio español Last Chicken Game, que debutó con Willy Jetman: Astromonkey’s Revenge en 2020, poco antes de que el mundo sufriera el temible ataque del coronavirus.
A sólo unos días de cumplir su cuarto aniversario, el estudio nos trae Jett Rider, que es una versión mejorada de dicho lanzamiento. En su momento no tuve la suerte de volar por el espacio con Willy Jetman, así que comencé muy entusiasmado mi trabajo como barrendero espacial con Jett Rider.
Así es, en esta aventura no somos el típico guerrero cósmico repleto de armas y con habilidades extraordinarios. O bueno, por lo menos no al principio. Somos un simple reciclador cuya misión es limpiar los distintos planetas que visita, acompañado de su nave espacial Gladys, que no sólo es un transporte, sino también una inteligencia artificial que lo ayuda como una leal compañera y de paso es bastante chistosa. A pesar de tener la noble tarea de purgar cada sitio de lo que sea que los contamine, nuestro protagonista arranca con un eficiente jetpack, y también con una Machine Gun... lo que debería tener cualquier recolector de basura, supongo.
Con esta información, ya pueden imaginar que no estamos ante un juego de acción tan tradicional de avanzar y disparar... o bueno, un poco si y un poco no. Si bien en el camino nos toparemos con enemigos a los cuales arrojar nuestro arsenal de fuego, el objetivo principal de cada área será buscar los elementos "tóxicos" y llevarlos a un punto de reciclaje, los cuales estarán en determinados puntos del mapa. Hay que tener en cuenta varios factores, como que no podremos disparar mientras transportamos los elementos a reciclar, además de que algunos pueden explotar si les disparamos sin querer, o el hecho de que debemos deshacernos de todos para poder salir del nivel.
Al principio la tarea parece bastante sencilla, pero Jett Rider demuestra que no pretende achicarse y pronto nos empezaremos a encontrar con zonas más amplias, enemigos un poco más rebuscados, momentos en los que tendremos que sacar a relucir nuestras habilidades con el jetpack, y lindos bosses. Todo además siempre será acompañado por una pizca de referencias a otros grandes títulos.
Nuestro personaje podrá ir mejorando su armamento, el cual será cada vez más numeroso a medida que avancemos. Algo que quizás de un poco de pereza es que podremos equipar sólo dos armas, debiendo volver a la tienda a modificar esta decisión cuando nos topemos con obstáculos que requieran de alguna herramienta específica. De hecho, volver a este safe point será algo habitual, tanto para mejorar como para también salvar la partida.
No voy a negar que en determinado punto la tarea de estar llevando de un lugar al otro los objetos reciclables puede terminar cansando, sobre todo cuando los diseños de escenarios se vuelven un poco más temibles. En líneas generales el game design mantiene un buen balance entre exploración, disparos y dificultad, sólo que luego de unas horas quizás no se pueda evitar un poco de repetición. También hay momentos en los que los enemigos se reciclan bastante, o sólo cambian de color, y para colmo suelen respawnear, haciendo que debamos lidiar con ellos numerosas veces; y si son voladores, doblemente molestos.
Para incentivarnos a buscar por cada recoveco, los niveles esconden algunos secretos que bien vale la pena encontrar. Subir de nivel a nuestro personaje y sus armas es fundamental para no quedarnos atrás contra los bosses, y en general una de las partes más divertidas de Jett Rider es el ir volviéndonos más poderosos. Si bien el backtracking no está al nivel de un metroidvania, ciertamente hay una conexión entre niveles que lo hace bastante interesante.
Conclusiones
Jett Rider es una buena opción si disfrutaste de Willy Jetman: Astromonkey’s Revenge y querés hacer una segunda run con mejoras y más contenido. Estamos ante un entretenido juego de acción en 2D, cuya exploración, jetpack, sistema de mejoras y búsqueda de elementos a reciclar lo diferencian un poco de otras opciones. A medida que avanzamos se pone más desafiante, lo cual siempre es bienvenido en estos juegos. Es una buena opción, e incluye dosis de humor, pero no es ni de cerca un exponente del género.
Lo mejor
· Una aventura de acción en 2D entretenida y con sus toques distintivos.
· El sistema de mejoras nos motiva a explorar para volvernos más poderosos.
· Lindas peleas con bosses.
· Humor y referencias.
Lo peor
· La idea del reciclaje se puede volver pesada, además de que los enemigos también se repiten bastante.
· Tener que volver a los safe points a cada rato por no tener equipadas las armas necesarias para avanzar.
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