12 de Agosto del 2022

Análisis de Endling: Extinction is Forever - PS4

Una zorra tiene que sobrevivir junto a sus crías en un mundo impactado drásticamente en lo ambiental. Los humanos fueron los principales causantes y, por supuesto, también serán nuestros enemigos en esta aventura en 2D con fuerte carga emocional.

Desde hace muchos años, los videojuegos comenzaron a crearse con otros fines además del principal: entretener. Así empezaron a surgir videojuegos que exponían arte visual, otros que sólo nos contaban una historia a través de texto, y un grupo muy interesante que es el que se destinaba a educar. Sí, está claro que utilizar un videojuego como método de enseñanza es muy eficaz si se sabe combinar bien la parte interactiva con la informativa. Y este "género" no es ninguna novedad, ¿alguien más recuerda el juego de la momia y los cálculos matemáticos que estaba en las PC's de muchas escuelas primarias? (Juego-Mática). Éste es un ejemplo de miles que hay, lo doy simplemente porque me da mucha nostalgia. Con esta larga introducción, finalmente les presento este título en el que Herobeat Studios y HandyGames buscan educar y generar un poco más de conciencia ambiental, y todo bajo la piel de una zorra.

A diferencia de lo que creí cuando leí los adelantos, no estamos ante una aventura que se encarga explícitamente de lanzarte información sobre los daños y el impacto de la actividad humana en los ecosistemas. Realmente no necesita hacerlo, ya que el apartado visual se encarga perfectamente de transmitirnos el mensaje. De principio a fin, podremos ver y experimentar algunas imágenes bastante crudas, como animales prendidos fuego que corren desesperados, fábricas que generan contaminación, etc. Preferí empezar contando todo esto porque, a pesar de que estamos ante un título que incluso es bastante efectivo a la hora de entretener, se nota el especial énfasis en querer ampliar nuestros conocimientos sobre el asunto de parte de los desarrolladores.

Como mencioné, la protagonista de Endling es una zorra, quien comenzará escapando por su vida en una terrible secuencia en la que el bosque donde habita se incendia. Y no sólo huye desesperada para protegerse a sí misma... sino también a las crías que está por dar a luz. Si, no todo es tragedia en esta aventura, ya que al menos viviremos un momento muy agradable dando nacimiento a los pequeños zorritos e incluso personalizando sus pelajes. Pero claro, ahora nuestra manada debe ser alimentada, así que será nuestra tarea buscar comida, encontrar nuevos refugios, esconderse de los humanos y... sobrevivir a la extinción en un mundo post-apocalíptico ambiental.

Estamos ante una interesante mezcla de aventura y supervivencia en 2D (con cambios de eje) con un mundo semiabierto que, por supuesto, es de tamaño reducido. Es importante aclarar esto para que nadie piense que va a encontrarse un bosque inmenso o la longitud y bifurcaciones de un metroidvania. Si bien todo el mapa está interconectado, estamos hablando de una propuesta corta y el tamaño es el justo para ésta. Eso sí, hay que admitir que, a pesar de su linealidad, puede ser un poco laberíntico en ciertos sectores y obligarnos a sacar el mapa una y otra vez. Afortunadamente éste se abre y cierra al instante; de lo contrario sería mi primera queja.

Nuestra zorra es bastante ágil y veloz, pero quedará totalmente indefensa ante los temibles humanos. Por eso, el sigilo entra un poco en juego también, pudiendo desplazarnos lentamente cuando lo necesitemos. Al comienzo tendremos que llevar la comida que encontremos a la cueva inicial, pero pronto las crías crecerán y podrán acompañarnos. Lo interesante es que podrán ir desbloqueando habilidades sencillas pero que servirán para encontrar más puntos de interacción, como "cavar".

El juego está dividido en ciclos de noche y día, y nuestro objetivo básicamente es salir bajo la luna a buscar comida y evitar la muerte, ya sea por manos de los enemigos, o por el propio hambre. Una vez que empiece a salir el sol, seremos alertados de que lo mejor es regresar a la base. Hay otro objetivo principal, el cual irá avanzando en determinados días, pero no quiero comentarlo mucho para no spoilear; sólo tienen que saber que estaremos en una importante búsqueda. Otro detalle importante es que el título no es infinito, tiene su trama y desarrollo, por lo cual tenemos que aguantar como podamos hasta que el ciclo llegue a su fin y veamos el desenlace. No es como otros juegos del género que proponen ver hasta donde podés llegar.

Habiendo explicado las claves, tanto narrativas como jugables, es hora de exponer mis sensaciones sobre este dramático pack. Claro que me ha hecho emocionar y reflexionar, y es un título ideal para que prueben aquellas personas con falta de visión a la hora de cuidar un poco el planeta. Por dar el ejemplo más simple de todos, sigo viendo personas que tiran basura en la calle teniendo un tacho delante de sus narices, es una imagen que me hace enojar muchísimo. En ese sentido el juego cumple con transmitir ese mensaje.

Por el lado del entretenimiento, es una propuesta interesante y que conoce sus límites. No nos trata de hacer descubrir cómo desbloquear nuevos caminos, sino que te los desbloquea por arte de magia al pasar cierta cantidad de días. Si bien podría tener un montón de agregados y mecánicas adicionales, Endling se queda en lo seguro. Es por eso que hay días en los que, si venimos bien de comida, no pasa absolutamente nada, y es en éstos dónde me aburrí más. Podemos volver al refugio antes de tiempo, pero nos conviene explorar hasta el final. Artísticamente es muy bello, y la música ayuda mucho a potenciar su lado emocional.

Conclusiones

Endling - Extinction Is Forever es un juego simple y una buena opción para generar conciencia ambiental. Logra transmitir perfectamente su mensaje, a la vez que cumple como una aventura de supervivencia, con mecánicas sencillas y un pequeño mundo abierto. Si te gusta el género, es corto y entretenido, aunque siendo sincero no me parece un indispensable ni de los mejores títulos independientes del año.

Lo mejor

· La jugabilidad es sencilla pero cumple, Endling conoce sus límites y no intenta sobrecargarse de mecánicas.

· Su búsqueda por educar y generar más conciencia ambiental.

· Artísticamente es excelente, tanto en lo visual como en lo sonoro.

Lo peor

· El diseño del mundo hace que por momentos tengamos que abrir y cerrar el mapa todo el tiempo.

· Hay días en los que no ocurre nada y aburre.

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